Martín Lutero y la Reforma Protestante


Este 2017 se conmemoran 500 años de la reforma protestante iniciada por Martín Lutero. Sin duda, es uno de los acontecimientos más importantes de la Historia, y que logró finalmente dar forma al mundo tal como lo conocemos. Pero, ¿qué es la reforma protestante? ¿Cómo se inició? ¿Cuáles fueron las consecuencias?

Pues bien, la Iglesia en la época de Lutero se caracterizaba por haber perdido los principios bíblicos de los primeros cristianos. La lectura de la Biblia sólo se limitaba a unos pocos, debido al alto grado de analfabetismo, así que muchos pasajes bíblicos eran totalmente desconocidos y no habían sido leídos por siglos. De manera que la Iglesia era dueña del conocimiento bíblico y era la única que enseñaba e imponía doctrinas. 

La Iglesia además se había tornado pagana, corrupta, sin piedad religiosa, y el papado se había llenado de poder y riquezas como nunca antes. Para perpetuar este poderío, el Papa León X se interesó en construir la Basílica de San Pedro como símbolo para la Iglesia Católica. Y para financiar su construcción el Papa decidió recaudar fondos a través de una venta masiva de indulgencias. Una indulgencia era un certificado papal que eximía a la gente y a sus familiares muertos de las penas del pecado en el purgatorio. De manera que, mientras más se pagaba, más tiempo se eximía de permanecer en el purgatorio.


En el año 1517, un religioso agustino de 34 años y profesor de teología bíblica llamado Martín Lutero, protesta por la venta de indulgencias y por su descarada e inmoral venta. Se sabía que en Sajonia las indulgencias eran predicadas y cobradas por el fraile dominico Juan Tetzel, de acuerdo con el arzobispo de Magdeburgo, que se quedaba con la mitad de lo recaudado, y la otra mitad se enviaba a Roma para pagar los gastos de la construcción de la Basílica de San Pedro (Sociedad Bíblica Chilena). Tetzel afirmaba que al tintinear las monedas al caer en la caja de recaudación un alma se libraba del purgatorio. Así la gente compraba el perdón de pecados, y al mismo tiempo compraba el perdón de pecados futuros. 

Así que, el 31 de Octubre de 1517 Lutero redacta un documento público con 95 tesis para protestar contra la venta de indulgencias, y lo clava en la puerta de la capilla de Wittenberg, en Alemania. Fue tal el impacto que este hecho sería conocido más tarde como el comienzo de la reforma protestante. Se trataba de 95 ideas que no solamente protestaban contra la venta de indulgencias, sino también protestaban contra la teología que enseñaba y practicaba la poderosa Iglesia Católica.


Así que, gracias a la imprenta recientemente fabricada, estas tesis se difundieron rápidamente en Alemania, y luego, por toda Europa. La reacción de la Iglesia en Roma no se hizo esperar. Lutero fue condenado por el Papa por hereje en la bula "Exsurge Domine" de 1520. Lutero también reaccionó quemando la bula y excomulgando al Papa. El Papa León X exigió que Lutero se retractara de sus tesis, pero el monje alemán, ya famoso en toda Europa, rechazó esta exigencia públicamente en la Dieta de Worms de 1521 con sus famosas palabras: 

“A menos de ser convencido por las Sagradas Escrituras o por razones claras, explícitas y manifiestas razones, yo no puedo retractarme. No le creo ni al Papa ni a los concilios, ya que está demostrado que a menudo han errado, contradiciéndose a sí mismos. Es mi conciencia esclava de la Palabra de Dios, y actuar en contra de la conciencia ni es bueno ni honorables. Yo no puedo obrar de otra manera. Aquí estoy. ¡Dios me ayude! Amén”. 

Esto fue suficiente para dar inició a todo un movimiento que culminó revisando no solo la venta de indulgencias, sino también toda la teología de la Iglesia Católica. Sólo bastó leer un versículo: “el justo por la fe vivirá” (Romanos 1:17), para que Lutero comenzara a esbozar la doctrina de la salvación por fe, sin las obras que exigía la Iglesia. Más tarde, para que la gente común pudiera leer la Biblia por sí mismos y en su propio idioma, Lutero traduciría completamente la Biblia al alemán en 1534, lo que contribuyó a la alfabetización del pueblo, el fortalecimiento del idioma alemán moderno, y el acceso al conocimiento masivo de la Biblia.  

El término "protestante" surgió en 1529, cuando los príncipes y nobles, que habían recibido la libertad para permitir las enseñanzas de Lutero en sus territorios, "protestaron" ruidosamente contra el decreto del emperador Carlos V que los obligaba a retornar al catolicismo.


Posteriormente, los teólogos protestantes que surgieron de este nuevo movimiento reformista, tales como Martín Lutero, Ulrich Swingli, Juan Calvino y John Knox, cambiarían el entendimiento de la salvación del hombre que la iglesia católica imponía, junto con toda la teología relacionada al plan de redención, resumiéndolas en cinco famosas frases, “las cinco solas”

SOLA SCRIPTURA (Sólo por medio de la Escritura) 
SOLUS CHRISTUS (Sólo a través de Cristo) 
SOLA GRATIA (Sólo por la gracia) 
SOLA FIDE (Sólo por la fe Dios salva) 
SOLI DEO GLORIA (La gloria sólo para Dios)

Estas cinco solas separaron definitivamente el protestantismo del catolicismo. Para los protestantes, la palabra “sola” se convirtió en una palabra clave, pues la Iglesia Católica también creía en la Escritura, pero no solamente en la Escritura. La Iglesia Católica también creía en Cristo, pero no solamente en Cristo. Las “cinco solas” se transformaron en los cinco pilares de la Reforma y la esencia de la fe cristiana, las que se pueden resumir de la siguiente manera (según lo explicado en este video):

“Sola Scriptura” (“Solo Escritura”). En la Edad Media, las Escrituras se guardaban en los monasterios, y la gente sólo las entendía mediante la interpretación de los líderes religiosos. Pero la Reforma liberó las Escrituras, llevándolas a las manos de la gente común, en sus idiomas y libre de la interpretación basada en las tradiciones de la Iglesia Católica. La Escritura es inspirada por Dios (2 Timoteo 3:16-17), y está por encima de cualquier tradición. 

“Solus Christus” (“Solo Cristo”). La Iglesia medieval era poderosa y se atribuía la mediación entre Dios y la humanidad. El Papa era visto como el representante de Dios en la Tierra. Pero los reformadores encontraron en el Nuevo Testamento que Cristo era el único mediador entre Dios y los hombres (1 Timoteo 2:5), y la cabeza de la Iglesia (1 Corintios 11:3). Se había cuestionado por primera vez la autoridad del Papa. 

“Sola Gratia” (“Solo gracia”). En la época de Lutero, la gente pagaba por la salvación mediante las indulgencias o la entrega de ofrendas en las iglesias. Los líderes se aprovechaban entonces de la ingenuidad de la gente. Pero los reformadores encontraron en las Escrituras que salvación era solamente por gracia (Efesios 2:8). 

“Sola fide” (“Solo fe”). En la Edad Media se vivía con un constante miedo al infierno. La salvación no tenía que ver la fe, sino que era entendida como una serie de cosas que se debía hacer (“obras de justicia”). Sin embargo, uno nunca estaba seguro de haber hecho todo lo correcto para ser salvo. Sin embargo, los reformadores encontraron en el Nuevo Testamento que la salvación viene por medio de la fe, sin necesidad de ninguna obra (Efesios 2:8-9). 

“Soli Deo Gloria” (“Sólo a Dios la gloria”). Las 95 tesis de Lutero denunciaron la decadencia de la iglesia medieval. Los Papas y los obispos vivían como reyes, llena de lujos y pompa. Mientras los pobres morían de hambre, el oro se amontonaba en el Vaticano. Los reformadores vieron en este lujo una autoexaltación que quitaba la gloria a Dios. Pero los reformadores comenzaron a predicar lo que las Escrituras dicen: “Porque de él, y por él, y para él , son todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos. Amén.” (Romanos 11:36).